En este libro, apreciamos una dinámica constante de hechos y acciones que devienen, imaginativamente, a partir de realidades y figuras cotidianas. Una actividad visual, dispuesta a la sorpresa comparece allí donde participa el ser y sus relaciones urbanas: las ocupaciones del hombre como acontecimiento extraordinario y sujeto, por contraste, a una ironía reparatoria. Aquí confirmamos que lo verosímil es el elemento activador de toda imagen, es decir, la individualidad o metáfora de otra cosa.